EL ENTIERRO DE LA SARDINA EN PÒRTOL, UNA TRADICIÓN MUY VIVA

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Desde el año 1993, Pòrtol celebra el Entierro de la Sardina, y lo hace con gran participación de los vecinos del núcleo y de otros puntos de Marratxí, siguiendo siempre un estricto ritual. Se encarga de la organización la Associación de Persones Majors Es Turó, con Remedios Martínez al frente.

La celebración (y es ya la edición número 27) comienza con un desfile por las distintas calles con la figura gigante (de unos dos metros y medio) de una sardina de cartón-piedra que los miembros de la misma entidad hacen con las propias manos dos o tres semanas antes de la celebración.

La sardina está acompañada en todo momento por una extensa comitiva fúnebre, formada por plañideras, gente vestida de luto y vecinos que siguen los pasos de la Banda de Música de Marratxí.

Una vez acabado el desfile, se pide permiso a la máxima autoridad (en este caso, el alcalde) para hacer sonar la trompeta y proceder a la quema de la sardina en una gran hoguera, en medio de un espectáculo de gritos y llantos. Como dice Martínez, «un año más, las llamas de la hoguera purificarán la sardina con buena compañía».

A continuación, se hace una merienda en la que -claro- no faltan las sardinas. Este año, la fiesta está prevista para el día 5 de marzo, siendo la plaza de Can Flor el centro neurálgico.

Cabe significar que desde 2016 els ‘Espais Joves’ y el área de ‘Gent Gran’ del Ayuntamiento colaboran activamente en la organización de esta celebración.

El origen histórico

El Entierro de la Sardina es una fiesta pagana que, en todo caso, supone el punto y final del Carnaval (tiempo de diversión desenfrenada y sin límites) para iniciar el tiempo de Cuaresma, que equivale a abstinencia (un tiempo fue abstinencia de sexo y también gastronómica, referida a la carne).

Para hacer el traspaso entre una época y otra y disfrutar del último día de «libertad absoluta», mucha gente salía a la calle a merendar.

Respecto a la denominación de la celebración, Entierro de la Sardina, hay dos hipótesis principales. Una dice que «sardina» era una manera coloquial de nombrar el espinazo del cerdo, que históricamente se enterraba antes de comenzar la Cuaresma. Una segunda hipótesis vincula el nombre con el gremio de zapateros de Madrid y el siglo XVI. En aquella época, los zapateros hacían una parada en el trabajo para merendar a base de pan tostado, con una sardina y un vaso de vino.

En cualquier caso, es una tradición muy arraigada en muchos lugares de toda España. En Murcia, incluso, es la fiesta más importante de la Comunidad Autónoma.