El Ayuntamiento de Marratxí, a través del área de Medio Ambiente, organiza unos cursos de compostaje doméstico para ayudar a los marratxiners a reducir los residuos orgánicos. El curso, impartido por Amics de la Terra, se lleva a cabo en la Deixalleria y participan entre 12 y 14 personas. Es una forma de concienciar a la ciudadanía de los beneficios de la economía circular ya que el 40% de los residuos son orgánicos y con el compostaje se dejan de producir. Durante el curso se explica que el compostaje doméstico es una herramienta barata para generar abono rico en nutrientes para el jardín o las macetas y respetuoso con el medioambiente El objeto del proyecto es fomentar el compostaje de la fracción orgánica en los hogares del municipio. La fracción orgánica comprende, principalmente los restos de comida y los restos vegetales de pequeño tamaño de tipo no leñoso (césped, hojarasca, ramos de flores, etc.), pudiendo suponer un 40% en peso de la bolsa doméstica de basura aquellos núcleos donde no haya recogida selectiva. Marratxí es un municipio con un número significativo de viviendas con espacio y características adecuadas para la instalación de compost, para llevar a cabo este tratamiento en el ámbito doméstico. Por cada 100 kg de residuos, se obtienen 30 de compuesto y, de este modo, se favorece la retención del agua de riego, lo que supone un ahorro de agua de entre el 30 y el 70 %. Los participantes en los cursos se van con la idea de que cualquier compostera tiene el objetivo de cerrar el ciclo de los alimentos, que vuelven a la tierra para alimentar aquello de donde han salido. El compuesto se puede utilizar en el jardín o en el huerto, mejorando las características del suelo. Reducción de los residuos generados y de las emisiones contaminantes. La duración del curso es de un trimestre. Entre los beneficios se encuentran los ambientales porque el compuesto se puede utilizar en el jardín o en el huerto, mejorando las características del suelo, además de que se reducen los residuos generados y las emisiones contaminantes. También hay un claro beneficio económico para la fracción orgánica, en caso de recogida selectiva o de su compostaje en el ámbito doméstico, no supone un coste económico añadido para el municipio.Se aconseja que las composteras estén formadas por un contenedor de reja metálica, de madera o de plástico. El compostador debe estar situado en un lugar protegido para evitar variaciones tanto de temperatura como de humedad. La posición ideal es bajo un árbol de hoja caduca, de manera que esté a la sombra en verano y expuesto al sol en invierno. Se recomienda colocar el compostador sobre la tierra, nunca sobre cemento, asfalto o pavimento, para permitir a los descomponedores presentes en el suelo la colonización del recipiente. Amics de la Terra recomienda en su manual de compostaje que se regule la entrada de aire y humedad manteniendo el contenedor cubierto o cerrado. Los materiales leñosos deberán ser cortados en trozos no mayores de 5 cm, por lo que son precisas unas tijeras de poda, un hacha o una trituradora vegetal. También sería útil disponer de una herramienta aireadora para mover y airear los materiales y, incluso, de una pala para recoger el compost ya hecho. Es necesario contar con un tamiz para separar la parte perfectamente compostada los fragmentos leñosos y las partes sin descomponer, todavía presentes. Fases y tipos de compost El proceso de compostaje principalmente se divide en dos fases, ambas siempre en presencia de oxígeno. La primera fase es la de la descomposición y degradación, donde la temperatura puede llegar a los 70ºC y una duración entre 6 y 8 meses. Y la segunda fase, de maduración, donde se multiplican pequeños animales como gusanos, cochinillas e insectos que se nutren de los microorganismos, restos vegetales y varios invertebrados, contribuyendo así a la formación de compost maduro.
